El sodio es un mineral presente en el organismo de manera natural, ya que cumple varias funciones vitales en el mismo como:
- Transmisión de impulsos nerviosos
- Contracción muscular
- Regulación de volumen y presión sanguínea
A pesar de que juega un papel fundamental en las funciones corporales, es importante considerar que el consumo diario recomendado de este mineral es de máximo 1600 mg por día, es decir menos de 4 g de sal al día.
Se encuentra principalmente en la sal de mesa como cloruro de sodio; éste es uno de los alimentos más concentrados en sodio, ya que 1 gramo de sal contiene un 40 % aproximadamente de sodio, es decir 400 mg.
Sin embargo, debemos tomar en cuenta que existen otros alimentos y productos que contienen este elemento como:
- Productos empaquetados (chips, galletas, panecillos, dulces, etc.)
- Refrescos y jugos
- Productos enlatados
- Condimentos en pastilla o polvos, caldos artificiales y sopas preparadas
- Embutidos (chorizo, salchicha, jamón, salami, tocino)
Para este tipo de productos se utilizan compuestos a base de sodio para conservar los alimentos, resaltar sabores, retener humedad y hasta cubrir los sabores menos deseables.
Muchos de los alimentos naturales que consumimos como los champiñones, lentejas garbanzos, espinacas, coliflor, cebolla, espárragos, mariscos, carnes rojas y como ya mencioné la sal de mesa, contienen sodio, por lo que es muy fácil llegar y hasta sobrepasar la cantidad recomendada.
Además, la alta ingesta de sodio está relacionada con enfermedades cardiovasculares como: hipertensión arterial sistémica, accidentes cerebrovasculares, obesidad y enfermedades como osteoporosis y cálculos renales.
Te recomiendo preparar tus alimentos con la menor cantidad de sal posible, utiliza especias para condimentar tus platillos y evita el consumo de productos con sodio añadido.
Por: Mariana Jerez