El ejercicio físico es una parte importante para mantener una buena salud en cualquier etapa de nuestra vida sumado a una alimentación adecuada, ya que, algunos de sus beneficios son inmediatos y otros a corto, mediano y largo plazo.
Nuestra activación puede ir desde una caminata con nuestro amigo de cuatro patas o con nuestra familia hasta una rutina mucho más específica y personalizada a nuestras necesidades o practicar algún deporte.
Algunos beneficios que pueden verse reflejados de forma inmediata en nuestro cuerpo son:
- Reduce la ansiedad.
- Aumenta la calidad de nuestro sueño.
- Disminuye nuestra presión arterial.
- Mayor concentración.
Por otro lado, en etapas de vida tempranas como la infancia o la adolescencia, la actividad física puede prevenir la aparición de enfermedades respiratorias, gastrointestinales y a largo plazo reduce el riesgo de sobrepeso, obesidad, diabetes e hipertensión.
En adultos, ayuda a mantener un peso saludable con la realización de 150 minutos semanales, es decir, 30 minutos al día; reduce el riesgo de padecer enfermedades del corazón, algunos tipos de cáncer y mantiene huesos y músculos fuertes, lo que es vital para edades avanzadas.
Estamos seguros que tenemos 30 minutos de nuestro día a día para dedicárselo a nuestro cuerpo, salud y calidad de vida sino, podemos encontrar espacios en nuestra agenda para integrar la actividad física. Por ejemplo: si nuestro lugar de trabajo se encuentra muy cerca de nuestra casa, podemos hacer uso de la bicicleta o caminata; estacionar nuestro coche lejos de los lugares que frecuentamos y caminar, nos activará.
Recordemos que en nuestra aplicación móvil de Fit body encontrarás rutinas de ejercicios buenísimas para mantenernos activos sin olvidar que, el ejercicio también es una forma de agradecerle a nuestro cascarón, nuestro cuerpo, todo lo que hace y aguanta por nosotros. Una buena alimentación y actividad física es la mejor manera de invertir en nuestra salud.
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