Iniciando en el mindfulness

¡Nuevo día, nuevo BreakFit! En ésta ocasión vamos a hablar de un tema muy famoso y comentado en los últimos años, pero que no es tan nuevo como nosotros pensamos, nos referimos al Mindfulness. 

Desde hace más de dos mil quinientos años, millones de personas han practicado diversas técnicas meditativas, transmitidas ya sea por religiones o por tradiciones espirituales, no es raro ver como cada año hay más interesados en estas prácticas, pero ¿Qué es la meditación?

La meditación se define como el proceso a través del cual, la persona observa y se hace consciente de lo que está sucediendo a cada instante en su cuerpo y en su mente, aceptando las experiencias que se van presentando tal y como éstas son, o sea, vivir en el aquí y el ahora. Esta práctica fue enseñada por Buda y tiene como objetivo la erradicación del sufrimiento y demás emociones negativas a través de la mente, ya que desde el punto de vista budista, tanto la felicidad como el sufrimiento son creados a partir de nuestros pensamientos. 

Ahora bien, te estarás preguntando ¿cómo entra el mindfulness en esto? Bueno, el mindfulness es el denominador común que tienen las diversas corrientes de meditación derivadas de la práctica budista, es la base, no es sinónimo de meditación, sino una forma de ella.  

Mindfulness es la traducción del término pali “sati”, que significa conciencia, atención y recuerdo. Por su parte, la traducción al español no tiene un significado preciso, algunas personas lo han traducido como “atención plena”, mientras que otras apuestan por “conciencia plena”, por lo anterior, la mayoría opta por el vocablo en inglés. 

Como mencionamos con anterioridad, esta práctica no es nueva, sin embargo, las publicaciones sobre el mindfulness comenzaron a aparecer en la década de los setentas, teniendo un crecimiento acelerado hasta el día de hoy, lo que le ha permitido tener múltiples definiciones, entre las que destacan: 

“Mantener la propia conciencia en contacto con la realidad presente”, propuesta por el doctor Jon Kabat-Zinn y su equipo, en el año 1979. Otra definición fue la que dio el doctor Chris Germer en 2005, en la que postula que el mindfulness es la “conciencia de la experiencia presente con aceptación”. De igual manera destaca la definición proporcionada en el 2007 por el doctor Vicente Simón “Capacidad humana universal y básica, que consiste en la posibilidad de ser conscientes de los contenidos de la mente momento a momento”. 

Ahora bien, el mindfulness puede referirse a tres situaciones; un constructo, una práctica y un proceso psicológico. Para este blog nos enfocaremos en la práctica, ya que esta permite admitir cada uno de nuestros pensamientos y emociones que estamos experimentando, con el fin de poder identificarlos, pero sin ninguna clase de prejuicio. 

En la práctica, lo que se experimenta es una conexión fuerte con nosotros mismos, en cuerpo, mente y emociones, debido a que nos concentramos en el momento presente, esto nos permite generar una mayor capacidad para alinear nuestros pensamientos y sentimientos con cualquier propósito que tengamos.

El mindfulness se basa en 5 preceptos que provienen del zen, los cuales son: 

Atención al momento presente: Centrarnos en el momento y lugar en el que nos encontramos, dejando de lado el pasado y el futuro. 

Apertura a la experiencia: Observar y disfrutar la experiencia sin emitir juicios personales.

Aceptación: Experimentar los eventos sin oponer resistencia, aceptando lo bueno y lo malo del momento en el que estamos.

Dejar pasar: Desprendernos de aquello a lo que nos aferramos. Como seres humanos estamos acostumbrados a querer poseer ya sea un sentimiento, una relación, dinero etc. Recordemos que nada en el mundo material es para siempre, hay que dejarnos fluir.

• Intención: Hace referencia a lo que cada uno de nosotros persigue a través del mindfulness, puede sonar contradictorio a todo lo descrito arriba, pero cuando meditamos debemos tener un propósito personal que guíe nuestra mente. 

Para poder llegar al estado del mindfulness es necesario entrenar de manera constante. Ya lo dijimos, la meditación y el mindfulness no son lo mismo, pero se puede llegar a este a través de las diversas técnicas de meditación que existen como el yoga, la meditación guiada, la respiración consciente y el escaneo corporal. 

Aquí te dejamos algunos consejos que te ayudarán a ir practicando poco a poco la técnica que mejor se adecúe a ti para lograr alcanzar tu consciencia plena. Te recomendamos empezar lentamente, puede ser en sesiones de 5 a 10 minutos hasta que logres llegar a 30 que son los recomendados. 

1. Encuentra el momento adecuado: ya sea al despertar o después del trabajo, lo importante es que sea en un momento que dedique sólo para ti. 
2. El ambiente es importante: busca un lugar cómodo y tranquilo, donde no caigas presa de las distracciones. 
3. Siéntete cómodo: adopta una postura adecuada, puedes sentarte en el piso con la espalda recta, para no obstaculizar la respiración, recuerda usar ropa cómoda. 
4. Concéntrate en tu respiración: siente como el aire entra por tu nariz y pasa a través de tus pulmones, oxigenando todo tu cuerpo, después exhala por la boca sacando así todo lo negativo. Si sientes que te distraes intenta centrarte nuevamente en la respiración.   
5. Déjate fluir: todos tus pensamientos se darán cita en tu mente, acéptalos sin juzgarlos, sean buenos o malos, pero no permitas que roben tu atención, mantente neutral, observalos y déjalos ir. 

Conforme vayas practicando te será más sencillo lograr esa atención plena, recuerda que a través de esta práctica puedes dirigir el rumbo de tu vida de manera consciente. Pon en practica el mindfulness y cuentos cómo te fue a través de nuestras redes sociales. Te esperamos en el próximo BreakFit blog